Los británicos Pet Shop Boys no han parado de exprimir la fórmula que les dió a conocer a mediados de los 80 y les abrió las puertas del éxito. La utilización de sonidos dance/electrónicos abarrotados con una absorbente producción, y melodías muy comerciales, les han consagrado como uno de los dúos más conocidos de la música pop, llegando a vender más de 100 millones de discos.
"It's a Sin" es uno de los temas que les catapultó al número 1 de medio mundo, al igual que a todas las pistas de baile de cualquier discoteca que se considerara estar en la onda de la moda. Pertenecía a su segundo disco, Actually, logrando repetir y aumentar el buen sabor de boca de "West End Girls" y "Suburbia" de su disco de debut.
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